Finca rústica única en venta, en el norte de Mallorca: vistas impresionantes y esencia mediterránea.

Descripción de la propiedad

Finca Rústica con Encanto entre Santa Margalida y Can Picafort: Naturaleza, Estilo y Bienestar

Situada en el norte de Mallorca, entre los pintorescos pueblos de Santa Margalida y Can Picafort, esta exclusiva finca rústica ofrece una combinación única de serenidad, elegancia y la esencia más auténtica del estilo mediterráneo. Rodeada de un entorno natural privilegiado y a pocos minutos de las playas de la Bahía de Alcudia, la propiedad invita a disfrutar de una vida plena en contacto con la naturaleza.

Privacidad y ubicación estratégica

Ubicada en una parcela de 8.970 m², la finca garantiza privacidad total y vistas despejadas al paisaje mallorquín, al mismo tiempo que mantiene una conexión óptima con los servicios locales y el mar. Esta ubicación estratégica permite disfrutar de la tranquilidad del campo sin renunciar a la comodidad diaria, con las mejores playas a solo 10 minutos en coche.

Espacios pensados para disfrutar

La vivienda recibe con una acogedora terraza cubierta, perfecta para disfrutar del clima mediterráneo y de momentos al aire libre. En el interior, los espacios han sido diseñados para ofrecer amplitud, confort y calidez:

Cocina totalmente equipada con mobiliario de roble y zona de comedor.

Salón independiente con acceso directo a las terrazas, ideal para reuniones o momentos de relax.

Cuatro dormitorios luminosos, dos de ellos con baño en suite, más dos baños adicionales y un aseo de cortesía.

Planta superior con un loft exclusivo, baño en suite y terraza privada con impresionantes vistas a la Serra de Tramuntana.

Exteriores que invitan a vivir el Mediterráneo

La finca está concebida para disfrutar de cada instante al aire libre:

Piscina privada con amplias terrazas para relajarse o tomar el sol.

Casa de barbacoa con cocina de verano, ideal para veladas con familia y amigos.

Pista de pádel y gimnasio con sauna, perfectos para quienes valoran el deporte y el bienestar sin salir de casa.

Tradición y confort en perfecta armonía

La propiedad combina el carácter tradicional mallorquín en su arquitectura y materiales con todas las comodidades modernas, ofreciendo un hogar donde la autenticidad y el confort conviven en perfecta armonía. El ambiente de calma, las vistas abiertas y la proximidad al mar hacen de esta finca una oportunidad excepcional en el norte de la isla.

Una oportunidad única en Mallorca

Si busca un hogar que reúna espacio, privacidad, autenticidad y cercanía al mar, esta finca es la elección perfecta. Contacte con nosotros para más información o para concertar una visita personalizada y descubrir todo lo que esta propiedad tiene para ofrecer.

Ubicación y alrededores:
Santa Margalida es un harmonioso Municipio del noreste de la isla de Mallorca. Además del pueblo principal de Santa Margalida, situado en el interior de la isla, los dos pueblos de Can Picafort y Son Serra de Marina también pertenecen a este Municipio. Ambos están situados directamente en la costa, en la Bahía de Alcudia.
Hay muchas leyendas y mitos sobre el lugar y la imagen de Santa Margarita. Al final, estos dieron su nombre al Municipio.
Santa Margalida se caracteriza sobre todo por su exuberante agricultura. En los campos se cultivan cereales, pero también hay árboles de olivos, almendros y algarrobos.
El mercado de este pueblo tiene lugar todos los martes y sábados por la mañana en el centro, en la Plaza de la Vila. Marroquinería, frutas, verduras, especialidades mallorquinas, textiles y mucho más están a la venta en los diferentes puestos del mercado. Pasee por los distintos puestos y tómese tiempo para explorar los alrededores a pie. De este modo, podrá descubrir la clásica y auténtica Santa Margalida. Disfrute del hermoso ambiente y déjese fascinar por los carismáticos edificios de construcción tradicional.
El edificio más famoso de la ciudad es la iglesia parroquial de Santa Margalida. Se construyó en 1232 y ofrece a sus visitantes una fantástica vista panorámica gracias a su posición ligeramente elevada.
Los que busquen paz y tranquilidad se sentirán totalmente cómodos en Santa Margalida: mucha naturaleza, aire fresco y un ritmo de vida más pausado.